El pasado 3 de febrero, el alumnado de 1º de ESO se desplazó
hasta Granada para realizar una visita cultural junto al profesor de Religión, Alberto
y la profesora de Inglés, Anto. Visitaron la Abadía del Sacromonte y sus
alrededores y, a la tarde, disfrutaron de los servicios del centro comercial
Serrallo Plaza. La alumna Paula Román Peláez nos cuenta su experiencia.
Llegó el día más esperado, 1º de ESO iba a visitar Grananada y más concretamente el barrio del Sacromonte. Al llegar a la Abadía del Sacromonte, nos bajamos del
autobús y Alberto nos dio un calendario de Manos Unidas a cada alumno. Acto seguido, nos fuimos a unos
patios que había dentro para esperar un momento hasta que nos abrieran. A pesar
del frío que hacía, todos nos hacíamos fotos y permanecíamos con una sonrisa en
la cara de lado a lado. Era espectacular ver como éramos de felices. Por fin
nos abrieron, pasamos a dentro y una guía turística nos explicó en qué iba a
consistir nuestra visita.
En primer lugar, nos anunció que íbamos a visitar el museo, luego la iglesia y, por último, las
cuevas. Predijo que las cuevas eran lo que más nos iba a gustar y, la verdad es
que estuvo bastante bien. Cuando entramos al museo nos advirtió que solo se podían
echar fotos en la iglesia, pero he de reconocer que no la obedecimos mucho.
¡Era inevitable no fotografiar tanta belleza! Para parte del alumnado, el museo
fue un poco aburrido aunque, por otra parte, se veía interesante. Al menos a mí
me lo pareció. Pudimos observar legados artísticos y otras obras de interés.
Tras esta visita, entramos a la iglesia y lo primero que
hicimos fue sacar cámaras de fotos y móviles para aprovechar que se podían
hacer fotos. Allí encontramos las imágenes que sacan de procesión en Semana Santa
y nos maravillamos con su decoración.
Por último, fuimos a ver las cuevas y vimos una imagen de
San Cecilio, patrón de Granada. Como el día antes, el 1 de febrero, se había
celebrado su día y la romería hacia la abadía del Sacromonte, lo encontramos
todo muy adornado y lleno de flores. Cuando terminamos, nos salimos otra vez a los
patios para esperar al autobús. En ese momento, Alberto me dio una noticia que
me hizo muy feliz, ¡uno de los mejores momentos
de vida! Llegó el autobús y
todos nos montamos rumbo al centro comercial Serrallo Plaza para almorzar y
pasar la tarde.
Durante el viaje, todos iban cantando la canción que canto
Nicolás, el profesor de música, el Día de la Paz y que dice así:
Vamos, Paula, sal a bailar
que tú lo haces fenomenal,
tu cuerpo se mueve como una palmera
suave, suave, su, su, suave.
Y bailando, se pasó más rápido el trayecto. En el centro
comercial lo pasamos de lujo comprendo, comiendo, jugando en las zonas recreativas,
fotografiándonos, sobre todo disfrutando de los amigos.
Y ahora me gustaría contarles por qué este día fue tan increíble. ¿Recordáis cuando al
principio dije que mi profesor Alberto me había dicho una cosa muy
especial para mí? ¡Aún no me hago a la idea! Mi profesor conoce a uno de los componentes
del grupo musical Auryn y me prometió que trataría de conseguirme un autógrafo.
A la vuelta, estaba tan agotada que empecé a escuchar música
para tranquilizarme a pesar del ruido que había. Como iba con los ojos medio
cerrados, mis compañeros quisieron fotografiarme con los ojos cerrados pero no
lo lograron. Así acabo nuestro viaje y espero que pronto programen otro porque
estas experiencias son de las que luego te acuerdas de mayor y nunca olvidas.
Paula Román Peláez, alumna de 1º ESO A.
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