La mayoría de ellos entraron por empezar a
juntarse con personas inadecuadas. Todo continua por empezar a robar por necesidad, caer en las drogas y alguno de ellos incluso a traficar con estas. Todas estas cosas, que empiezan como una tontería, acaban así por culpa de malas influencias, etc.
La primera mujer que habló era de Baza. Nos
contó que era una niña malcriada y que, cuando sus padres no tenían para comprarle lo que ella quería, empezó robando unas deportivas, luego una camiseta y terminó acabando por electrodomésticos, televisores, etc. También dejó de ir al instituto y se inició en el consumo de porros.
Otro hombre cayó en estas cosas por su infancia en la que vio cosas muy
desagradables por parte de su padre. Los padres de este hombre no hacían mucho caso a sus hijos e hijas. Su madre era depresiva y su padre alcohólico. Por esta razón él empezó con malas juntas y finalmente cayó en la droga.
Los demás hombres tuvieron historias similares. Empezaron a juntarse con quien no debían y eso les llevó a entrar en el mundo de las drogas. También nos dijeron que los hombres que de alguna forma los metieron en la cárcel ni se acuerdan de que existen y luego van de amigos.
Esta charla nos sirvió de mucho pues estas personas presas nos dieron muchos consejos para no acabar como ellos y tener una buena y tranquila vida. Esperamos que les haya gustado y que os parezca igual de interesante como a nosotros.
María Ramos Álvarez y Raúl Mera Martínez, alumnos de 2º de ESO.
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